miércoles, septiembre 13, 2006

LA CONDESA DE NOAILLES



Ignacio Zuloaga, La Condesa de Noailles, 1913, Oleo sobre lienzo, Museo de Bellas artes de Bilbao.


Texto:


¿Quién pasó murmurando: "caduca y pobre arcilla"?
Dime: ¿quién te decía "carne perecedera"?
Un día tornará, señora, cuanto era
como se han de hacer flor los granos de la trilla.

Este es nuestro ascetismo: damos como semilla
aventada las carnes a la hoya postrera
y aunque pase la edad sin una primavera
tras el Juicio tendremos primavera en Castilla.

Para los ojos míos eres --perdón, señora--
tan de tornasol vago, tan huyente y de ahora,
tan de elegida y rara y dulce fragilidad,

que sueño en la terrible y angélica y sonora
hora en que las trompetas de Dios den a la aurora
el grito: "¡Hágase todo carne y eternidad!"

Rafael Sànchez Mazas, de "Siete sonetos ante el retrato de la condesa de Noailles".